El Día Internacional de la Mujer Trabajadora cumple más de un siglo de vida, sin embargo, en la actualidad, el mensaje que conlleva este día es igual de necesario que cuando comenzó. Se celebra un movimiento internacional a favor de los derechos, igualdad, seguridad y justicia de las mujeres en todo mundo.
El 8 de marzo representa un día de conmemoración y recuerdo a las mujeres de todos ámbitos laborales, culturales y sociales. Sin olvidar, que seguimos luchando por una igualdad absoluta, ya que aún no se ha conseguido.
Origen de este día
¿Qué sucedió el 8 de marzo de 1857?
En plena Revolución Industrial, las calles de Nueva York se llenaron de trabajadoras textiles que criticaban sus míseras condiciones laborales. Reivindicaban un mejor horario y el fin del trabajo infantil. El lema que les acompañaba en su marcha era “Pan y rosas”.
- «Pan», significaba, mejores condiciones de trabajo, jornadas más cortas, mejores salarios, equidad en la paga.
- «Rosas», la conquista de una vida plena, llena de belleza y alegría.
Esta marcha es considerada como una de las primeras manifestaciones para luchar por los derechos de la mujer. Fueron muchas las protestas que le sucedieron, una de las más importantes fue la de las camiseras en 1909. Sin embargo, es en 1975 cuando la ONU decide establecer el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer, en referencia a la manifestación de Nueva York.
Huelga feminista: origen
La primera huelga feminista oficial fue en Islandia en 1975, en lo que se conoció como «el viernes islandés», lo que provoco una serie de huelgas en cadena alrededor de todo el mundo. Ese mismo año desde la ONU se había declarado «el año de la mujer», en solidaridad con las feministas de la segunda ola.
En los grupos feministas de Islandia empezó a germinar la idea de crear la primera huelga de mujeres. El objetivo era visibilizar a las mujeres en todos los aspectos de la sociedad. En concreto se centraba en el trabajo doméstico no remunerado y en la exigencia de mayor representación política de este colectivo. Para no condicionar los puestos de las trabajadoras, el grupo feminista lo nombro como un «día libre» en vez de una huelga.
El paro tuvo una respuesta masiva, más de un 90% de islandesas respaldaron la huelga, incluso se cesó el trabajo doméstico y el cuidado de los hijos, que recaía mayoritariamente en las mujeres. Resultó todo un éxito, ya que ese día tuvo consecuencias económicas muy negativas para todo el país, demostrando así la importancia de la mujer en la sociedad y en el mundo laboral.
«Si nosotras paramos, el mundo se para»
Lema oficial del 8M.
En 1976 gracias al éxito de dicha huelga, el parlamento islandés promulgó una ley que garantizaba la igualdad de derechos para hombres y mujeres. No obstante habría que esperar hasta 2009 para ver a la primera presidenta en Islandia: Jóhanna Sigurðardóttir, que además fue la primera jefa de estado lesbiana.
Evolución de los derechos políticos
El caso de Nueva Zelanda
Nueva Zelanda fue el primer país en reconocer el derecho al voto femenino, esto tuvo lugar el 19 de septiembre de 1893. Eso no quiere decir que en otros lugares del mundo no hubiera ya una anticipación o un precedente a este derecho, aunque con bastantes limitaciones. El derecho al voto femenino transitó por caminos de protestas, encabezadas por mujeres como Elisabeth Cady y Susan Anthony, fundadoras de la Organización Nacional de Mujeres Sufragistas en Estados Unidos (1869) . En 1776, por error de transcripción, se aprobó el derecho al voto de las mujeres en Nueva Jersey, puesto que se aprobó una ley que reconocía tal derecho a las “personas”. Dicha ley fue abolida en 1807.
Hubo que esperar a las próximas elecciones de Nueva Zelanda, en 1916. Fueron las primeras votaciones femeninas totalmente libres, y contó con la participación del 65% de las neozelandesas. No obstante, el derecho al voto no conllevaba el derecho a participar en la vida política, ni formar parte del gobierno.
La protagonista de este hito histórico fue Kate Shepard. Nacida en Liverpool y con fuertes raíces al socialismo-cristiano, una vertiente muy fuerte en Inglaterra. Se mudó a Nueva Zelanda donde fundó la Unión Cristiana de Mujeres por la templanza de Nueva Zelanda. A partir de ese momento, Shepard se encaminó en una lucha constante por los derechos políticos de las mujeres y su desigualdad jurídica. Kate consiguió que 32.000 personas firmaran un documento que exigía el sufragio femenino, el cual fue incluido en el Registro de la Memoria del Mundo de la UNESCO en 1997. Finalmente, el 19 de septiembre de 1893 se aprobó la nueva ley electoral, que desde el principio contó con el apoyo del primer ministro Richard Seddon.
Derecho al voto de la mujer en España
En España el derecho al voto de la mujer llegó en 1931, en la Segunda República. Hay que decir que, durante la Dictadura de Primo de Rivera, de 1923 a 1930, se produjo un primer intento de sufragio femenino, pero únicamente se aprobó para las elecciones municipales, que nunca llegaron a celebrarse. En las elecciones a Cortes Constituyentes de junio de 1931, realizadas por sufragio universal masculino, a las mujeres se les reconoció el derecho al sufragio pasivo, por lo que pudieron presentarse como candidatas. Sin embargo, solamente salieron elegidas tres, Margarita Nelken, en las listas del Partido Socialista Obrero Español, Clara Campoamor, en las del Partido Republicano Radical y Victoria Kent, en las del Partido Republicano Radical Socialista. Hay que decir que muchos estuvieron en contra del voto femenino, uno de ellos fue el catedrático de patología de la Universidad de Madrid, Roberto Novoa Santos. No se reconoce hasta la Constitución de 1931 ( II República), poniéndose en práctica en 1933.
• Artículo 36. «Los ciudadanos de uno y otro sexo, mayores de veintitrés años, tendrán los mismos derechos electorales conforme determinen las leyes.» •
Durante la dictadura franquista ( 1939-1975) este derecho se pierde, al ser un régimen antidemocrático, recuperándose en 1976.
“No puedo decir si las mujeres son mejores que los hombres. Sin embargo, sí puedo decir sin dudar que no son peor”
Golda Meir, primera mujer ministra de Israel
Actualidad
El artículo 21 de la DUDDHH señala:
- Toda persona tiene derecho a participar en el gobierno de su país, directamente o por medio de representantes libremente escogidos.
- Toda persona tiene el derecho de acceso, en condiciones de igualdad, a las funciones públicas de su país. (…) “
Los derechos políticos incluyen el derecho a voto, el derecho a participación y el derecho de postularse para cargos políticos. Para garantizar estos derechos, la Convención para la Eliminación de todas las formas de Discriminación contra las Mujeres (CEDAW) estableció dos acciones: las cuotas de género y programas dirigidos al fortalecimiento de la mujer. Las cuotas de género suponen garantizar que haya paridad entre hombres y mujeres en los cargos públicos. La segunda medida tiene como objetivo fortalecer o incentivar la incorporación de mujeres a proyectos internacionales.
Por lo que podemos decir que en Occidente los derechos políticos de la mujer están garantizados y no es algo inusual que una mujer forme parte del ejecutivo de un gobierno, u obtente cargos de poder en una empresa.
Destaca el caso del gobierno de Finlandés, donde 12 de los 19 integrantes del gobierno son mujeres. Además, la primera ministra Sanna Marin se ha convertido con sus 34 años en la persona más joven en acceder a este cargo. Aunque como ella misma mantiene, lo importante no es el sexo ni la edad, sino el trabajo bien hecho.
Mujeres que han marcado la historia
Es considerada la precursora del movimiento feminista y de la reivindicación de los derechos de las mujeres. Fue una escritora y pensadora británica, en 1790 escribió Vindicación de los derechos del hombre, obra ocultada hasta el siglo XX. El objetivo que quería conseguir con esta obra era la reivindicación de la independencia y la educación de las mujeres: “Educad a las mujeres como a los hombres. Ese es el objetivo que yo propongo. No deseo que tengan poder sobre ellos, sino sobre sí mismas”. Murió poco después de dar a luz a su hija Mary Shelley, escritora y creadora de Frankenstein.
Escritora y docente, se le conoce como una de las mujeres que más hizo por los derechos de la mujer. Sin embargo, al igual que la conocida Frida Kahlo, sus ideales feministas entraban en contradicción con sus relaciones personales, las cuales destacaban por ser machistas y tóxicas. La obra que le valió su puesto en la historia feminista fue El segundo sexo, publicada en 1949, en esta reivindicaba la independencia económica de la mujer frente al hombre y apostaba por un papel social y familiar alternativo para la mujer.
Una de las primeras periodistas de investigación, de las primeras corresponsales de guerra mujer y la pionera del periodismo encubierto, se internó voluntariamente en un manicomio de mujeres para escribir un reportaje para el New York World, de Joseph Pulitzer. Superó a Julio Verne y dio la vuelta al mundo en menos de 80 días. Fue siempre una inconformista y nunca permitió que menospreciaran su trabajo y su valía por ser mujer.
Activista a favor de los derechos civiles. Se enfrentó al régimen talibán por prohibir a las niñas la asistencia a la escuela. Sus ideales le llevaron a recibir un disparo en la cabeza al regresar de la escuela en su ciudad (Mingora). La joven ha extendido su lucha a nivel mundial a pesar de todos los inconvenientes que le han ido surgiendo. Fue premiada con el Nobel de la Paz en 2014, convirtiéndose en la persona más joven en acceder a ese galardón.
Científica polaca descubridora del Polonio y el Radio como elementos químicos. Pasó por numerosas calamidades para no renunciar a su pasión como investigadora. Decidió no patentar con su nombre el proceso de aislamiento del Radio dejándolo a disposición de la comunidad científica. Fue pionera en el campo de la radiactividad y la primera mujer en recibir dos premios Nobel en distintas especialidades, en Física y en Química.
Escritora británica que se convirtió en uno de los máximos símbolos del feminismo y modernismo literario del siglo XX. Tuvo una dura infancia, sufrió abusos sexuales por parte de sus hermanos. Lo que le ayudó a crear en su interior una fuerte mentalidad de lucha contra el machismo que plasmó en su obra.
Escritora, política y defensora de los derechos de la mujer española. Cuando las mujeres eran una minoría en la Universidad, la española se hizo un hueco y se licenció en Derecho. Trabajó como abogada y tramitó los primeros divorcios. Cuando las mujeres no existían en el Parlamento, ella entró en el hemiciclo defendiendo sus derechos. Fue una figura imprescindible para conseguir el derecho al voto femenino en España.
Nacida en 1853 en Vilaseca. Fue la primera mujer española y europea en acceder a los estudios universitarios. Desde su adolescencia dejo constancia de sus capacidades intelectuales, cuando pidió permiso para acceder al examen de licenciatura el comité tardó tres años en concedérselo por el hecho de ser mujer. Finalmente estudió medicina como un estudiante más, sus compañeros la recibieron entre aplausos el primer día que pudo acudir a clases oficialmente, y no como oyente.
Fue una política y escritora española. La primera mujer en acceder a un cargo ministerial en España durante la II República, y una de las primeras mujeres europeas en hacerlo. Durante el tiempo que estuvo en el gobierno, diseño algunos proyectos sociales como la creación de lugares de acogida para la infancia, comedores para embarazadas, liberatorios de prostitución, una lista de profesiones a ejercer por minusválidos y el primer proyecto de Ley del aborto en España. Aunque ninguno de ellos fue llevado a cabo ya que su cargo no duró ni un año debido a la Guerra Civil.
Nacida en Málaga en 1898 es una de las mujeres andaluzas más relevantes por sus logros. Fue la primera mujer en España en ejercer la abogacía durante la dictadura de Primo de Rivera, además de formar parte de las tres únicas mujeres del parlamento durante la II República.
Nació en Sevilla en 1972, es una de las mujeres andaluzas con más éxito profesional. Es doctora en lingüística computacional por la Universidad de Sevilla. En 2003 cofundó, junto a Gabriel Amores, la startup Indisys (Intelligent Dialogue Systems) dedicada al reconocimiento de voz y la creación de asistentes virtuales. Años después vendieron la empresa a Intel, ella empezó a formar parte del equipo de dirección del área de innovación y desarrollo. En 2016, empezó a trabajar en Amazon como directora de interfaces cognitivas.
Procedente de Cádiz, es considerada la primera periodista española del siglo XVIII. Fundó «La Pensadora Gaditana» el primer periódico escrito por un equipo integro de mujeres y cuyo público potencial eran estas, aunque hay que apuntar que en esta época el nivel de analfabetismo era muy alto, más aún entre las mujeres.
Esta lista es sólo un pequeño repaso del conjunto de mujeres que han conseguido hitos históricos y que con sus logros han demostrado que como mujeres pueden ejecutar todo tipo de actividades profesionales y políticas. Hay que recordar a todas aquellas mujeres anónimas e invisibles que todos los días trabajan por destruir el concepto machista y patriarcal que algunos siguen teniendo. Aún quedan muchas cosas por conseguir, más incluso en países no occidentales, donde todo lo que damos por hecho en nuestra sociedad, como los derechos políticos, es solo una utopía para estas sociedades.
¿Qué otras mujeres pensáis que deberían de aparecer en la lista?