¿Eres de los viajeros a los que le gusta recorrer el mundo y visitar varios destinos en poco tiempo? Hace ya varios que ha surgido una forma alternativa de viajar: el Couchsurfing. Es un modelo de alojamiento en el que uno se hospeda de manera gratuita en casa de un desconocido. No debes preocuparte si eres una persona desconfiada, ya que tu anfitrión lo eliges antes de viajar a través de su plataforma. Además, puedes mantener cierto contacto antes de la visita.
¿Qué es y cómo desenvolverse haciendo Couchsurfing?
Couchsurfing nació como propuesta entre los surfistas australianos que viajaban por todo el país en ‘búsqueda y captura’ de las mejores olas. Se movían a puntos diferentes en periodos breves de tiempo y preguntaban por foros, páginas web y redes sociales sobre la posibilidad de disponer de algún sofá –couch en Inglés significa sofá- donde pasar la noche. Al principio los huéspedes eran otros amantes del surf, sin embargo, poco a poco la hospitalidad fue extendiéndose a personas que nada tenían que ver con ese deporte.
Así surgió esta idea de alojamiento gratuito y, poco a poco, fue creciendo a una forma de conocer personas de todo el mundo y aprender de su cultura.
Actualmente, es una comunidad global de 14 millones de personas en más de 200 000 ciudades que comparten su vida, su mundo, su viaje.
¿Qué es exactamente el Couchsurfing?
Al registrarse en su plataforma entras dentro de una comunidad de amantes viajeros que buscan alojamiento gratuito en casas de desconocidos a cambio de un intercambio cultural. No se trata de aprovecharse del hogar de una persona que ha abierto sus puertas a un extraño. Consiste en ayudarse los unos a los otros y enriquecerse a nivel personal. Aunque no es obligatorio, tú deberías de corresponder en el futuro alojando a tu anfitrión o a otra persona. Estas quedadas pueden ser el posible comienzo de una buena amistad.
¿Cómo son sus miembros?
Los couchsurfers son personas apasionadas, abiertas y sociables, dispuestos a aprender del resto del mundo. Tanto la persona que acoge de sus invitados, como los huéspedes de sus anfitriones. Es una muy buena forma de conocer un lugar y sus gentes, sus costumbres y hábitos. Se profundiza más que en el simple hecho de ser turista que viaja a un hotel y tan sólo visita lo que ha visto en las guías turísticas.
Alojarse con un desconocido
Puede que al principio de un poco de reparo alojarse en la vivienda de un extraño, sin embargo, realmente la plataforma lo pone muy fácil. Posee un sistema de verificación de los usuarios, tanto de los anfitriones como de los trotamundos, en el cual se comprueban los datos de identidad, dirección y teléfono, para que éstos no sean falsos.
Dentro de la plataforma existen grupos que crean los usuarios, por ejemplo, de aquellos que buscan alojamiento en una ciudad determinada, de quedadas en próximos días, de recomendaciones a otros viajeros por parte de amigos locales, etc. Además, todos usuarios son evaluados por la comunidad, dejando comentarios positivos o negativos al respecto, de tal forma que uno puede guiarse para elegir con quién conviene mejor hospedarse.
A parte de conocer nuevas personas y compartir gustos y aficiones es otra oportunidad más para perfeccionar idiomas o de conocer uno nuevo. Al pasar mucho tiempo con la otra persona, se practica idiomas por ambas partes de forma intensa, por lo que es una buena red social con la que mejorar los conocimientos lingüísticos que se han ido aprendiendo a través de las clases.
¿Cómo funciona?
Si estás interesado en Couchsurfing, lo primero que tienes que hacer es crearte un perfil. Esto es fundamental y va a permitir a los otros miembros conocerte un poco mejor.
Cuando estés preparado, busca la ciudad que quieras visitar y explora los locales con sofás disponibles. Cuando encuentres anfitriones interesantes, revisa su perfil y envía una Couchrequest para las fechas que quieras visitar la ciudad.
La mayoría de las ciudades tienen un evento semanal que generalmente se lleva a cabo en un bar o una cafetería.
Una vez hayas experimentado el Couchsurfing, considera poner a disposición de los viajeros tu sofá, habitación extra o colchón de aire.
Couchsurfing de pago
La pandemia también ha afectado a esta plataforma. En 2020 hubo actualizaciones para asegurar la supervivencia de la plataforma. Antes del COVID era gratuita, sin embargo, a partir de ese momento hay que pagar. El precio para acceder a los servicios de esta plataforma es de 2,39 € al mes, o 14,29 € al año (impuestos incluidos). Se paga a través de tarjeta de crédito o de PayPal.
Hay países que no tienen que pagar, debido a que es prácticamente imposible tener acceso a una cuenta bancaria en algunos lugares del mundo.
¿Piensas que puedes disfrutar de una gran experiencia con esta forma de viajar?
¿Has hecho alguna Couchsurfing? ¿Dónde ha sido? ¿Cómo fue la experiencia con tu anfitrión? Puedes compartir tus experiencias en los comentarios. ¡Gracias!