Estás visitando los rincones de Sevilla por cualquier ocasión. Disfrutas de su agradable temperatura, de su gastronomía, de sus costumbres y de la estancia en general… De repente, te das cuenta de que no conoces a ningún lugareño o sevillano que te enseñe los rincones más allá de los típicos. No te preocupes, porque entonces este blog es perfecto para ti.
¿Qué rincones ver en Sevilla?
La Catedral de Sevilla, la Giralda, los Reales Alcázares, la Plaza de España… y numerosos monumentos que nadie se quiere perder en su agradable visita a Sevilla. Sin embargo, esta ciudad no sólo tiene lugares mundialmente conocidos, sino que existen otros rincones de Sevilla menos comunes y que merece la pena explorar. Con más de tres millones de turistas en el año 2022, Sevilla nunca deja de sorprender a los recién llegados con su arte y su historia. Además, si eres uno de aquellos interesados en conocer cada rincón de esta ciudad, primero puedes leer información sobre los lugares más conocidos.
Una vez dicho esto, acompáñanos y piérdete en la esencia de una de las ciudades con mayor cultura andaluza y lugares secretos que la hacen aún más bonita de lo parece ser.
Museo de Arte y Costumbres Populares
Este museo sevillano es uno de los diez ubicados en la ciudad, más concretamente en la Plaza América del Parque María Luisa. Antiguamente, fue el pabellón de Arte de la Exposición Iberoamericana de 1929. Creado oficialmente como museo en 1972, hoy día posee una colección de objetos significativos de la historia de la ciudad desde el siglo XV al XIX.
Iglesia Hospital de los Venerables
Situada en el famoso barrio de Santa Cruz en pleno centro histórico de Sevilla, más concretamente en la Plaza de los Venerables. Esta Iglesia es del estilo barroco del siglo XVII, conocida popularmente como Hospital de los Venerables. Cuenta con una sola nave cubierta por una bóveda de cañón y un patio sevillano, conjunto dedicado al pintor Diego Velázquez. Actualmente es la sede de la Fundación Focus, donde se encuentra el Centro Velázquez, una exposición permanente conformada por doce obras de arte.
Costurero de la Reina
Es cierto que actualmente se le conoce por ser el Punto de Información Turística, aunque tiene su origen en el año 1893. Este edificio tan particular, situado cerca del Parque de María Luisa, se trata de el primero neomudéjar de Sevilla. Se le conoce como Costurero de la Reina gracias a una leyenda popular. Actualmente se trata de la Oficina Municipal de Turismo de la ciudad.
Fábrica de Artillería
Situada en el barrio de San Bernardo y muy cerca del centro histórico, se encuentra la Real Fábrica de Artillería de Sevilla. Este enorme complejo de edificios, relacionado con la expansión ultramarina en la Edad Moderna, que se fundó originariamente en el año 1565. Se trataba del lugar donde realizaban la fabricación de armamento, continuada y sistemáticamente. De esta edificación original no quedan restos y, es por ello, que se construyó una nueva fábrica en 1720. Se trata de edificios de estilo barroco tardío con algunas incorporaciones neoclásicas. En 1991, la fábrica deja de estar en funcionamiento para pasar a ser un Centro Cultural pasado el año 2015.
Iglesia de San Luis de los Franceses
Se trata de un gran ejemplo de la arquitectura barroca europea del siglo XVIII, ubicada en la calle San Luis, en el centro histórico de Sevilla. Diseñada por Leonardo Figueroa y construida entre los años 1699 y 1730 como lugar de culto para los jesuitas de aquel entonces. Fue así hasta su expulsión a manos de Carlos III a finales de siglo. Hoy en día pertenece a la Diputación de Sevilla y está categorizado como lugar de interés monumental.
Casa de Pilatos
Se trata de un palacio formado por un complejo de edificios como son los patios, plantas y jardines. Pertenecía a la antigua casa nobiliaria de los Medinaceli, y ha pasado a ser uno de los edificios más emblemáticos de lo que sería la arquitectura sevillana del siglo XVI. Combinando el estilo renacentista italiano y el mudéjar, es el mejor edificio nobiliario andaluz de la época.
Calles del centro histórico
Pero Sevilla no es sólo conocida por sus elegantes y emblemáticos monumentos. Es también conocida por características calles, más bien estrechas, irregulares y repletas de leyendas e historias. Presta atención a estos rincones porque sólo de esta forma podrás conocer lugares en los que perderte en el puro encanto sevillano.
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Calle Verde
Se trata de una de las calles más estrechas de la ciudad, ubicada en el corazón de la Judería de Sevilla. En el Barrio de Santa Cruz y muy cerca de la Giralda, esta calle no se llama así porque sus fachadas sean de color verde, sino porque la calle está invadida por la naturaleza. Esto le da un toque especial, un olor, y, sobre todo, para aquellos que visitéis Sevilla en época de calor, un respiro para humedecerte de las temperaturas primaverales y veraniegas. Detrás de esta calle hay miles de historias y leyendas, debido a que fue por esta zona donde ocurrió la matanza de los judíos y otros fenómenos extraños.
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Calle Susona
Localizada también en el Barrio de Santa Cruz, esta calle tan pintoresca y curiosa es la que conecta la Plaza de Doña Elvira con la calle Pimienta. Y tan curiosa que posee un azulejo de una calavera, tras el cual existe una leyenda por la que es conocida la calle de la Muerte, debido a la historia de una joven judía, Susona. Para que no te quedes con la intriga, te haremos un pequeño spoiler: la joven, traicionó a su familia por amor a un noble cristiano.
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Calle Agua
Más conocida como el callejón del Agua, es en el Barrio de Santa Cruz donde, como has podido ver, las calles son las que tienen un color especial. Antiguamente conocida como Muro del Agua, debido a la muralla que la limita con los Reales Alcázares, y que en su interior transportaba dos tubos de agua. Con una longitud de 140 metros, es al final de este callejón patrimonial donde se encuentran los preciosos Jardines de Murillo.
Plazas en el centro histórico
Para poder hablar de los rincones de Sevilla, es esencial hablar también de las plazas de la ciudad. Famosas y reconocidas por el encanto de la arquitectura andaluza que las rodea, dichas plazas te invitan a relajarte y disfrutar del ambiente que te ofrece esta ciudad, especialmente en la época del azahar, la primavera sevillana.
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Plaza de Santa Marta
Una pequeña y escondida plaza ubicada en uno de los rincones de Sevilla más transitados, junto a la Catedral de Sevilla. A esta plaza se accede a través de un callejón, que parece no tener salida, en la calle Mateos Gago. Debido al tamaño de la plaza, es recomendado no acudir en grupo para poder ver su real encanto y que no quede como masificada en el recuerdo. Lo que más acapara la atención en esta diminuta plaza es la cruz del centro, rodeada de naranjos sevillanos.
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Plaza de Doña Elvira
Situada de nuevo en el Barrio de Santa Cruz, se trata de una plaza que surgió a partir de una reurbanización producida en Sevilla a principios del siglo XX. Preciosa por fuera e interesante por dentro, debido a la historia que hay detrás, cuyo protagonista es Don Gonzalo de Ulloa.
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Plaza del Patio de Banderas
Dentro de las murallas del Alcázar de Sevilla se encuentra esta plaza del Barrio de Santa Cruz, repleta de naranjos plantados a mediados del XIX. Con vistas a la Giralda, esta plaza rectangular solía ser el antiguo patio de armas del Alcázar. Su nombre se debe a que era donde se colgaban las banderas cuando el rey llegaba a la ciudad.
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Plaza de la Alianza
Es una preciosa plaza bastante transitada, con una fuente protagonizando el centro, y ubicada en el Barrio de Santa Cruz. Con naranjos que adornan los exteriores y casas de lo más tradicional, es un lugar perfecto para relajarte y tomar algo mientras disfrutas del sonido del agua de su fuente.
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Plaza Escuelas de Cristo
Otro de los secretos del Barrio de Santa Cruz es la plaza de Escuelas de Cristo. Se trata de uno de los lugares menos frecuentados por turistas, debido a su difícil acceso. Esto se debe a sus pequeñas dimensiones, a las que se pueden acceder a través de la Iglesia Santa Cruz o un callejón aparentemente sin salida. Con olor a azahar, aquí encontrarás la fachada del oratorio de la Escuela de Cristo de la Natividad, la cuál da nombre a la plaza.
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Plaza del Cabildo
Por último, una preciosa plaza ubicada en el centro histórico, concretamente en el barrio del Arenal de Sevilla. Se trata de una plaza interior semicircular del siglo XX que perteneció al Colegio San Miguel, con una fuente central y tres posibles formas para acceder.
Una vez te hemos dado toda esta información, te recordamos visitar primero los lugares más emblemáticos de la ciudad, debido a que son los más fáciles de encontrar. Sin embargo, estos otros rincones de Sevilla merecen también mucho la pena, y visitándolos te damos la oportunidad de adentrarte en el ambiente sevillano más puro, gracias a que tienes que callejear para acceder a cada uno de ellos.
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